Porqué tu HARA es único y no es el de otra persona, debes conocerlo y aprender bien de él:

¿Qué es y qué significa?

Hara, es una expresión de origen japonés que significa “vientre”, pero su sentido trasciende la simple interpretación bio-fisiológica.

Hara, representa el centro donde se unifican los principios que rigen la mente y el cuerpo expresándose como una totalidad. Centro, en la medida que el cuerpo es la envoltura natural y la estructura fundamental del Ser.

Hara, es el vínculo primordial de la vida humana que nos ancla en la Tierra. Es el nexo que nos relaciona con la Naturaleza, condiciona nuestro enraizamiento y nos proporciona la medida justa de nuestro Ser en relación con el entorno y las circunstancias de cada momento presente.

¿Qué aprendemos y para qué sirve?

A construir un árbol frondoso, fuerte y flexible, adaptable al viento, con capacidad de penetrar las raíces profundamente en la tierra, con la posibilidad de extender sus ramas hasta el cielo, llenas de flores y hermosos frutos.

Dicho de otra manera, aprendemos a desarrollar una estabilidad fundamentada en una perfecta síntesis de nuestras potencialidades.

Estudiamos la manera de gestionar y organizar nuestra mente, a través de estructurar la acción del cuerpo, generando espacio interior, fluidez y creatividad a pesar de los obstáculos y el caos que a veces nos envuelve.

Refinar y enfocar la voluntad, la atención y la intención.

Mantener la dirección y el propósito de la meta sin perder la conciencia ni el gozo del camino.

 En definitiva, conseguir alinear nuestras energías en una unidad, cultivando la visión, la escucha, la sensibilidad y el poder de la presencia.

¿Cómo se practica?

Hara, se ejercita las 24 horas del día, incluso durante el sueño.

La conciencia de Hara, se revela sólo mediante la síntesis de toda la gama mental concreta y abstracta, los estados emocionales y el acondicionamiento físico en la actividad diaria.

Se adquiere a través del impulso que da la búsqueda interior, y ésta surge por causa del vacío, del miedo, del sufrimiento y del dolor. Sin estos motores o señaladores, no podemos comprender HARA.

El resultado sólo depende de lo que estemos dispuestos a arriesgar, a entregar y a asumir en nuestra vida cotidiana.

Ejercitaremos el eje, el centro y la estructura corporal consciente, constantemente en todas las prácticas. Estudiaremos cómo se sustenta y cómo se llena el espacio que envuelve nuestro organismo. Entrenaremos el arte de proyectar la fuerza y no disiparla. Y entenderemos CUANDO es el momento de realizarlo, adaptándonos a los ciclos propicios dentro del tiempo.

El juego será uno de los elementos principales del curso.

PMT (Psychosomatic Martial Training) Es el uso y disfrute de conceptos marciales sin la característica competitiva o de desorbitada violencia de algunas 'artes marciales' de contacto. Nuestra finalidad es la conciencia, la armonía, la coordinación y la presencia delante del conflicto. El concepto ritualístico tradicional del arte marcial pueden ayudarnos a entender mejor en qué consiste esta Práctica, ya que nos sumerge en una identidad plena, en una sincronicidad serena y en un condicionamiento apropiado a nuestras necesidades diarias.

Realizaremos patrones de ordenamiento interior, escenificando y exteriorizando posteriormente lo aprendido.

Un instante basta para tener Hara, otro para perderlo.

Pero para integrar, comprender y realizar este principio, se necesita toda una vida.

Las prácticas físico-emocionales son el soporte para la comprensión de este Método.

Las prácticas sobre el pensamiento, conducen a producir una mente más concreta y organizada, así como a generar una conexión con lo abstracto y a despertar la intuición y la visión internas.

Las prácticas grupales están enfocadas a despertar la Conciencia de equipo, libre y no sectaria, pero con las premisas de la participatividad y el compromiso hacia una finalidad común. Si queremos ser un Todo, tenemos que aceptar ser Parte.

En los primeros encuentros, se ejercita el centramiento en la postura de pié, sentado y andando.

Se aprende a proyectar el pensamiento a través del cuerpo y la acción concreta.

Jugar a desestabilizar al otro, nos permite arraigarnos, aprender a escuchar el movimiento del compañero, comprender la adaptabilidad con el cuerpo y a no dejarnos llevar por el sentimiento de victoria o derrota, aumenta nuestra capacidad de defensiva y genera una mayor auto confianza.

Se enseñarán prácticas individuales de conexión con la Tierra, para anclar el Hara y activación del campo energético con experiencias básicas.

HARA es la puerta a la experimentación.

Retos y objetivos: Analogías de algunas prácticas con nuestra vida cotidiana. 

Activación del Hara a través del pensamiento abstracto y desarrollo de las herramientas básicas para acceder al Laboratorio interno.

HARA es una Formación Viva y adaptable a los grupos y a las personas. Las temáticas se ofrecen con la profundidad asequible para cada integrante, pudiéndose profundizar más o menos en los diferentes temas según se despiertan los intereses del grupo.